Hace un par de años se anunció la creación de un Laboratorio Nacional de Cómputo de Alto Desempeño(Lancad), una supercomputadora conformada por tres cúmulos de procesadores pertenecientes a laUniversidad Nacional Autónoma de México, la Universidad Autónoma Metropolitana y el Centro de Investigacion y Estudios Avanzados (Cinvestav). Este proyecto se hizo realidad a principios de este año integrando 170 servidores de las tres instituciones educativas mencionadas.
Pero los planes no han terminado. Recientemente el Cinvestav anunció que aumentará la capacidad de cómputo de esta supercomputadora de manera que se [convertirá en una de las 100 supercomputadorasmás veloces del mundo]http://www.cronica.com.mx/nota.php?id_nota=685248).
Según Mariano Gamboa, coordinador general de la Coordinación General de Servicios de Tecnologías de la Información y Comunicaciones del Cinvestav; el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) ya ha aportado los recursos para financiar la segunda parte de este Lancad. Sin embargo, esto permitirá que la velocidad de procesamiento llegue a unos 200 teraflops, muy por debajo todavía de los 15 petaflops que alcanzan los equipos más veloces del mundo; pero un poco más cercano a 1 petaflops, velocidad con la que el Lancad entraría al top 100.
Sin duda un proyecto muy interesante que ayudará a investigadores mexicanos a desarrollar sus investigaciones en territorio nacional y evitar su salida al extranjero. Otra cosa interesante es saber qué proyectos se desarrollarán para recuperar la gran inversión. 3 mil millones de dólares no son poca cosa. Y aunque nunca está demás invertir en ciencia y tecnología, si es importante que las inversiones que se hagan den frutos y no solo queden como un bonito —y costoso— adorno.
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